Sandra de Miguel González ha creado y domiciliado en Hive Five S&J Andorra Consulting Group, una empresa de consultoría, auditoría y gestoría con otros socios, con la visión de ofrecer un servicio integral al cliente, tanto en lo que se refiere a la vida laboral como personal, creando relaciones de confianza en las que el cliente sienta que puede contar con ellos para todo. Madrileña, su vida personal y profesional le ha llevado a Italia e Inglaterra antes de aterrizar en Andorra, hace ocho años, siendo actualmente un miembro más de nuestro espacio de coworking, donde conoció a su actual socio.
¿Cómo es tu experiencia de trabajar en un espacio de coworking?
Desde mi época en Londres he estado muy ligada a espacios de coworking. Tanto es así, que hace cuatro años decidí montar, junto a otros cinco socios, un coworking en Andorra. Aunque ya no estoy vinculada, esta decisión afianzó mi visión y opinión positiva hacia lo que significa trabajar en un espacio de coworking como Hive Five.
Para mi, el espacio de coworking es una experiencia muy enriquecedora. Aparte de tener tu propio espacio, con todo lo necesario para desarrollar tu trabajo diario, es un generador de networking. Estás en contacto con otras empresas, personas y proyectos que, en una oficina convencional, no podrías acceder tan fácilmente.
¿Qué es para ti lo más positivo de trabajar en Hive Five Coworking Andorra en cuanto a ubicación, instalaciones, servicios…?
Hay muchas cosas que valoro que trabajar en Hive Five, como es su céntrica ubicación, sus instalaciones y sus servicios, pero también, y como decía antes, estar en contacto con parte del tejido empresarial andorrano y las oportunidades profesionales que esto supone.
¿Qué destacarías de la relación con el resto de Hivers?
Tengo muy buena relación con mis compañeros de Hive Five. Tanto es así, que uno de ellos, Lluís Riba, es mi socio en S&J Andorra Consulting Group.
Al fin y al cabo, una de las cosas más importantes de un coworking es ésta: la relación que se crea entre los coworkers. Esto es el valor añadido que te proporciona trabajar en un espacio como este en vez de una oficina convencional.
¿Crees que el Principado de Andorra es un buen sitio para emprender o desarrollar proyectos innovadores? ¿Por qué?
Andorra es un país que puede ser un laboratorio para muchas verticales o sectores. Al ser de proporciones pequeñas, tanto en la población como en la extensión, hay muchas cosas que se pueden desarrollar desde aquí.
Además, el Principado es un polo de atracción para empresas y empresarios, tanto por sus ventajas fiscales como por su calidad de vida.
Todavía falta mucho para crear un tejido de emprendedores, especialmente falta esa conexión entre todos. Y es aquí donde la figura de un espacio de coworking como Hive Five es tan importante.
¿Existe alguna sugerencia de mejora que te gustaría ofrecernos, respecto a instalaciones, servicios…?
Creo que todo el equipo de Hive Five está haciendo un gran trabajo. Para mencionar algo, intentaría organizar más eventos que nos ayuden a conocernos mejor entre todos. Al igual que yo encontré a mi socio en Hive Five, creo que muchas más personas podrían encontrar proyectos en los que trabajar juntos. Potenciar esto es potenciar la economía andorrana y el sector empresarial del país.
¿A qué proyecto te gustaría que destináramos los beneficios del coworking, mediante la Fundación BOMOSA?
Desde hace tiempo estoy muy involucrada en temas de sostenibilidad de empresas y organizaciones. Tener una buena Responsabilidad Social Corporativa, que se preocupe por temas como el agua, el medio ambiente o los océanos, te brinda una ventaja competitiva frente a otras empresas del mismo sector.
Podría ser muy interesante, en este sentido, destinar parte de esos beneficios a transformar a las empresas hacia una RSC mucho más sostenible. Crear el cambio desde dentro, concienciando desde la parte empresarial para que inunde todo el sistema.
